El funcionamiento de un condón o preservativo no deja de ser la interposición en la penetración de una barrera de un material que permita seguir disfrutando de las sensaciones que el roce y el movimiento del pene produce en la vagina o el ano de nuestra pareja.
Tradicionalmente esto se ha resuelto recubriendo de una envoltura de látex (u otros materiales) el pene, evitando de esta forma el contacto directo entre ambas zonas íntimas (y por tanto las posibilidades de contraer una enfermedad de transmisión sexual y la posible llegada de semen al interior de la vagina, interrumpiendo el proceso de fecundación.
Alternativa femenina
Sin embargo, más recientemente se ha probado con modelos que funcionan de forma inversa, con un diseño también en un material fino y elástico, pero diseñado para cubrir la entrada e interior de la vagina.
El preservativo femenino, a diferencia del normal, es la mujer quien lo lleva insertado en la vagina dejando una abertura para poder introducir dentro de la vagina el pene o juguete sexual de elección,
El condón femenino protege al igual que el masculino de enfermedades de transmisión sexual y posibles embarazos...
